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*La moderación es el proceso de eliminar o atenuar los extremos, es buscar el equilibrio.     *En la moderación se halla lo mejor en ética, en política, en economía. Por eso, Rubén Darío decía que “la moderación es el mejor de los bienes”.     La Real Academia Española define la moderación como sinónimo de “cordura, sensatez, templanza en las palabras o en las acciones”.     Son esas, precisamente, las características o cualidades que más se deben poner en práctica dentro de la política nacional.    

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miércoles, 28 de marzo de 2012

Gobierno y ANEP avalan mediación (LPG)

 Concesiones.  Los jefes de pandillas le han pedido al Gobierno que suavice algunas medidas dentro de las cárceles. Quieren indultos para reos enfermos, más tiempo para sus visitas íntimas y equipo industrial para sus talleres. El ministro de Seguridad Pública, que había dado otras versiones para la reducción de los homicidios, reapareció ayer para apoyar públicamente las gestiones de la Iglesia en la supuesta tregua entre pandillas. La empresa privada, por separado, apoyó a Colindres pero exigió claridad en el tema al Gobierno.

El ministro de Justicia y Seguridad, David Munguía Payés, quien inicialmente atribuyó la reducción de homicidios a la operatividad policial, ayer hizo suya la versión aportada por la Iglesia católica para explicar la baja en los crímenes: dijo que dos pandillas que hasta hace un mes se odiaban a muerte han acordado un cese de ataques, gracias a la mediación del obispo castrense, Fabio Colindres.
Munguía avaló la mediación y ofreció apoyo a la Iglesia. También lo hizo la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP), gremial que, por separado, respaldó la intervención de la Iglesia en materia de seguridad pública.
“El Ministerio de Justicia y Seguridad Pública va apoyar, está apoyando y va a generar las condiciones para que la labor pastoral de la Iglesia siga su curso y nos ayude a ir disminuyendo poco a poco los índices de violencia en el país”, expresó el ministro.
Munguía, quien reapareció en una actividad pública después de 11 días de ausencia, no había mencionado la supuesta tregua entre las tres primeras versiones que dio sobre la disminución de homicidios y sobre el traslado de 30 jefes de pandillas del penal de máxima seguridad hacia reclusorios con menores controles.

Ayer, en cambio, compartió el crédito con la Iglesia y dijo que asumía las consecuencias de los traslados. “Hay un momento que dice uno ‘bueno ahora es conveniente realizar este tipo de cosas’. Yo tomé la decisión y asumo la responsabilidad, las consecuencias de todas estas decisiones, ustedes las están viendo”, declaró.

 El ministro de Seguridad afirmó que conocía las pláticas que estaba sosteniendo la Iglesia con las pandillas, pero manifestó: “No estaba autorizado a divulgarlo”.
 El ministerio de Seguridad no ha querido hacer oficial el listado de 30 jefes de pandillas que fueron beneficiados con los traslados. La Dirección de Centros Penales mintió un día después de los traslados, hechos entre el 8 y 9 de marzo. Nelson Rauda, director de esa institución, dijo que solo estaban trasladando a 11, negó que los trasladados fueran reos de alta peligrosidad y que los movían para prevenir incidentes previos a las elecciones del 11 de marzo.

Munguía expresó ayer que su ministerio no puede ser transparente en cuanto a las estrategias que utiliza: “El ministerio de Justicia es transparente en cuanto a la administración de los recursos, pero en cuanto a las estrategias que nosotros desarrollamos muchas veces no las podemos compartir. Por lo tanto no estoy obligado a decirte a ti los detalles de todo el trabajo que nosotros estamos desarrollando”, confesó.
 ANEP exige respuestas
La empresa privada calificó ayer de “esperanzador” el esfuerzo que ha hecho la Iglesia para ayuda a reducir los homicidios, pero exigió al Gobierno que asuma su responsabilidad en el tema.
La ANEP reprochó el silencio que ha guardado el presidente de la República, Mauricio Funes, quien hasta este día brindará una conferencia de prensa. El mandatario no ha aclarado si el Gobierno negoció beneficios carcelarios con los líderes de pandillas a cambio de una disminución de homicidios.
“Hemos estado preocupados porque cuando un país tiene situaciones inéditas como las que estamos viviendo no encontrar a un presidente preocupa. Son los primeros que deberían estarle explicando a la población qué pasa”, reclamó el presidente de la ANEP, Jorge Daboub, que no quiso responder si la empresa privada está convencida sobre la repentina conversión de las pandillas.

“El Vaticano demora 40 años en definir un milagro. Nosotros debemos dejar que las instituciones que están haciendo una gestión lo hagan. No somos jueces, somos empresarios”, contestó.
La ANEP se reunió ayer con Colindres. Él les dijo, según Daboub, que el diálogo con las pandillas incluye varias etapas. La gremial no tiene claro cuáles son los alcances de esas etapas. Lo que sí tienen claro los empresarios, dijo Daboub, es que continúan resintiendo el cobro de extorsiones.
Colindres, por su parte, dijo que se reunió con Funes el lunes pasado y que el presidente le agradeció por su intervención.
 El ministro, en tanto, auguró una posible disminución de otros delitos por el entendimiento entre pandilleros. “Y esperamos que esto sea nada más el augurio del desmontaje no solamente de los homicidios sino también de otros delitos que están siendo y han sido cometidos por la pandilla”, expresó el funcionario, quien agregó que todavía continúan buscando los cohetes que, según sus informes de inteligencia, servirían para que una fuga de Zacatecoluca: “Andamos detrás de esos Law sabemos que entramos y podrían estar en manos de los pandilleros pero eso todavía no lo hemos confirmado”.

 

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